Un simple plan
Apenas es octubre y no hay año nuevo,
ya ves, la costumbre de amar con el alma,
me desvela y me desnivelo
como el mar que nunca tiene calma.
Abrígate con un manjar de besos dulces
y un jugo de pasiones mañaneras,
quisiera ser el duende al que embrujes
con todas esas caricias que almacenas.
Un simple plan para mirarnos
sin que nadie más se entere
y en la quietud de nosotros, conquistarnos,
no sé a ti, qué te parece.
Pregunto y vuelvo a preguntarme
si en verdad había amado antes de ti
y sin demás, tiendo siempre a contestarme
que de seguro no, nunca había amado así.
Un simple plan para venir a enamorarnos
con la complicidad de cada día,
y puedo pensar en acariciarnos
como prefieras tú, dulce melodía.
Pregunto y yo mismo vuelvo a responderme
que el amor es como un vicio que acaricia
con dialectos donde suelo perderme
y al final, seguimos como niños sin malicia.
Comentarios
Publicar un comentario