Sin textura

Te escribo sin saber si me acompañas,

sin miedo a fracasar en el amor,

tus labios como simples telarañas

me atrapan y no muestro dolor.

Bendíceme, que estos días grises y olvidados

no tienen razón de ser si tú no estás,

escucha bien, que el cuento de los enamorados

pasó esta tarde por mi casa y nunca más.

Desnúdame que al fin y al cabo estoy muriendo

sin la textura de tus labios en mi ser,

mira que te lo estoy diciendo

porque solamente tú tienes ese poder.

Este vagabundo corazón

no tiene cama dónde ir a dormir,

está maldita mi pasión

y por si fuera poco, no quieres venir.

Ahora entiendo que es mejor

darse de baja antes de tener

que sufrir más en el amor,

porque siempre queda algo que perder.